IASOL, líder en instalaciones fotovoltaicas, subraya la relevancia del mantenimiento periódico de las instalaciones solares como un factor clave para asegurar su rendimiento óptimo y prolongar su vida útil.
Un correcto mantenimiento no solo evita problemas y averías, sino que también representa un ahorro a largo plazo para los propietarios de sistemas fotovoltaicos, al hacer que la instalación funcione a su máxima capacidad. La suciedad acumulada y los daños causados por las inclemencias del tiempo, como el granizo o las lluvias de barro, pueden reducir significativamente el rendimiento de los módulos fotovoltaicos. Un panel solar sucio o dañado puede experimentar pérdidas de rendimiento importantes y, en casos extremos, problemas graves como la formación de puntos calientes.
Desde IASOL destacan que la frecuencia de limpieza de los paneles solares depende en gran medida de la ubicación de la instalación y de las condiciones ambientales circundantes. En áreas con alta acumulación de polvo o suciedad, se recomienda una limpieza más frecuente para evitar una disminución en la eficiencia del sistema.
No obstante, antes de proceder con la limpieza, es esencial verificar que no haya cristales rotos, ya que esto podría poner en riesgo la instalación y la seguridad de las personas involucradas. Y esto debe ser llevado a cabo por técnicos encargados de realizar todas las labores de mantenimiento, bajo estrictas condiciones de seguridad, garantizando así la integridad de la instalación y del personal.
“Aconsejamos a los propietarios de sistemas solares estar atentos a cualquier disminución en el rendimiento anual de la instalación. Si se observan problemas como delaminación en la placa, grietas en el cristal, burbujas o rotura del marco, es crucial solicitar una revisión profesional inmediata. También es importante prestar atención a las alertas del inversor, que pueden indicar fallos en el sistema”, recomienda Cristian del Río Ruivo, Responsable de O&M de IASOL.
La empresa enfatiza la importancia de realizar comprobaciones exhaustivas en todos los componentes de la instalación, incluyendo módulos fotovoltaicos, protecciones, inversores, cableado y conexiones. Un mantenimiento integral garantiza que todos los elementos y protecciones estén en perfectas condiciones de funcionamiento.
El uso de termografías en los módulos fotovoltaicos, protecciones, cables,… es otra de las herramientas que IASOL emplea para detectar posibles problemas que no se ven a simple vista. Además, a través de su sistema de monitorización, permite controlar y vigilar remotamente los equipos y parámetros de las instalaciones, detectando y solucionando problemas de manera rápida y eficiente, incluso de forma remota en algunos casos.
Este sistema también facilita medir los rendimientos de la planta, analizar las condiciones meteorológicas y el estado de los equipos, y evaluar las causas de problemas en tiempo real o incluso retrospectivamente, gracias a los datos almacenados.
IASOL ofrece un servicio completo de valoración previa de la instalación, analizando las necesidades específicas para un mantenimiento adecuado. “Nuestro equipo técnico, altamente especializado y equipado con herramientas avanzadas, asesora a cada cliente para asegurar el óptimo funcionamiento de su sistema fotovoltaico”, concluye Cristian del Río Ruivo.